Nino es un chico com suerte. Acaban de nombrarlo Cubrelunas, el oficio com el que siempre há soñado.

En adelante, tendrá que tapar cada noche una parte de la luna para que la veamos menguar y crecer desde la tierra.

Por desgracia, en el último momento, Nino pierde la pastillita que le ha de permitir volar hasta su lugar de trabajo!

Los habitantes del pueblo deciden entonces echarle una mano, y de ese modo nos enseñam que nada resulta imposible cuando trabajamos en grupo y unimos esfuerzos.

En esta bella y poética historia, el escritor e ilustrador francés Éric Puybaret responde con imaginación y humor a una pregunta que los niños se hacen a menudo: por qué la luna cambia de aspecto cada noche?